He cambiado y seguiré mutando hasta el ultimo suspiro/respiro, aunque en esencia soy la misma eso lo entendí el viernes pasado, estoy feliz de ser quien soy de entender mi humanidad y ya no pensar que el mundo acabara si cometo errores he aprendido amarme aunque me equivoque, también a pararme con sabiduría de esas caídas.
Amo mi espíritu libre, estoy feliz aprendiendo hacer ropa, estoy feliz de encontrarme en el camino con seres bellísimos como las mujeres del taller, de encontrarme con seres humanos como los que vamos a las terapias los miércoles, estoy feliz de aprender un poquito mas de la vida, esas terapias, ese taller y el largo viaje emprendido hace tanto tiempo ya le están dando estabilidad a mi camino, una estabilidad que mi alma tenia años gritando que tuviera, lejos de excesos, solo en armonía conmigo misma y con los otros.
Y sonrío y sonrío muy feliz desde adentro porque de nuevo me siento viva, viva sin exigirle a un hombre me haga sentirlo, no busco un hombre para quien vivir, vivo porque existo y creo que una forma viable de relacionarse con los otros es compartir la independencia del ser y pararse firme para que los otros respeten lo que uno es. Doy luz desde muy adentro y esto sale por todo mi cuerpo y se expande por el Universo, el Universo esta conmigo, vive en mi y juntos somos unidad, me he perdonado y ahora se que puedo continuar mi camino.
